Última oportunidad

Llevaba tiempo que me rondaba por la cabeza.

Ya lo dije, de hecho. Pedí y pedí que se me ayudara. Hubo señales de haber sido escuchada, pero no hubo resultados positivos, o al menos no los que yo me habría esperado. Tantos fueron mis ruegos y tantos los fracasos que llegué a tener una pequeña crisis de fe.

Por suerte no fue lo unico que me planteé. Pensé que quizas simplemente tenia que ocurrir eso, tenia que costarme ¿pero porque? Pensé quizas tambien me negarme el aprobado era en realidad una ayuda... que no me lo tenía que sacar.

Vengo de clase de neuropsicologia. Llevo semanas oyendo hablar de tumores, accidentes cerebro-vasculares y hoy, de traumatismos craneales. Un surtido de lesiones cerebrales debidas a accidentes, muchos de circulación. Causantes de muertes, de comas profundos, de estados vegetativos, de secuelas cognitivas graves... Todas irreparables... Y todas inevitables, si hay un accidentes, y todos sabemos que éste no siempre se puede evitar (porque depende de terceros), y que en la moto, amigos mios, es mucho peor.

No, gracias. No quiero terminar así. Paso. No quiero el carné, ya no. Que son como 3mil euros invertidos, ok, pero 1. estoy demasiado cansada de seguir gastando dinero en loterias que gastan mi tiempo mi paciencia y mi dignidad, y 2. si ya me habia planteado que quizas era mejor para mi no sacarmelo para que el casco no se convirtiera en mi ataud, solo faltaba que en clase me recordaran lo fragil que es nuestro cuerpo.

Se acabó. Uno mas. Solo un intento mas. Si apruebo, bien, aunque ya no me apetece tener moto. Si suspendo, me da igual, se acabó, no voy a seguir perdiendo tanto en tan poco.

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Pocas palabras

Ha habido cosas que decir, pero muchas de ellas basadas en la rabia, y prefiero no plasmar palabras llenas de odio, hay otras cosas de las que hablar.

Estuve haciendo limpieza de primavera y entre mil papeles inservibles encontré uno doblado y curioso. En él solo habian rallotes con colores brillantes, probablemente hechos por Paula años atras, tambien unas palabras mias saludando a Sergi, y junto a éstas, su nombre completo, escrito por él y con faltas de ortografia.

En ese momento casi recordé cuando lo hizo, ya llevaba al menos un año sin ir a clase, y le costaba escribir, porque no veia bien. No tiene mas ese papel. Garabatos, una frase, y un nombre. Lo raro es que lo hubiera guardado, pero me alegro de haberlo hecho.

Eso es todo por hoy.

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